En la rueda de prensa posterior a la reunión de la Comisión Ejecutiva Federal, y un día antes de que la Junta de Fiscales de Sala decida sobre este asunto, Blanco reiteró a Cardenal su petición para que deje actuar a la Justicia.

Además, anzó un mensaje a Cardenal, al advertirle de que sería "contradictorio" evitar la imputación de Piqué y decir al mismo tiempo que se seguirá investigando.

Blanco recordó que el fiscal encargado de investigar este caso lleva años haciéndolo y, de hecho, ya obtuvo el aval de sus compañeros fiscales para imputar al ministro. En consecuencia, agregó, lo único que debe hacer Cardenal es dejar que ese proceso siga adelante.

Al ser preguntado, Blanco no quiso desvelar el momento procesal en el que los scialistas preven modificar su discruso y pedir responsabilidades políticas a Piqué.

"Nuestro secretario general ya dijo en el Debate sober el Estado de la Nación que desea lo mejor desde el punto de vista personal al señor Piqué, pero el señor Piqué no puede ampararse en el fiscal general del Estado para encubrir posibles delitos en los que pudiera haber incurrido", explicó.

De la misma forma, insistió en que el fiscal general "no puede seguir actuando como abogado defensor del Gobierno ni puede er la garantía de impunidad de los miembros del Consejo de Ministros y permitir que no sean iguales que otros ciudadanos".

Cardenal, concluyó, sólo ha conseguido una cosa: "que todo el mundo esté en contra de su actuación, incluidas las fuerzas políticas que apoyan al Gobierno sistemáticamente en el Parlamento".