Fuentes del grupo parlamentario ERC-IU-ICV explicaron a Servimedia que, aunque la negociación será de gobierno a gobierno y por tanto compete al consejero de Economía y Hacienda, Antoni Castells, Ridao defendió ante Salgado el concepto de "ordinalidad".

Este concepto, que las fuentes consultadas aseguran que también aplauden comunidades autónomas como Madrid y Valencia, consiste en que las regiones que más pagan sean también las que más recursos reciben del Estado en materia de infraestructuras y servicios sociales.

Metafóricamente, aclararon que no se discute que Cataluña, por su nivel de riqueza, pague la cena en mayor medida que la media, pero afirmaron que no es justo que, además, sea de los comensales que menos comen. Según sus cálculos, cada catalán aporta al Estado una media de unos 3.600 euros, mientras cada extremeño recibe unos 3.000 en recursos estatales.

105 SOBRE UNA BASE 100

Por ello, ERC-IU-ICV propondrá que, sobre una base 100 que correspondería a la media de recursos recibidos por las comunidades autónomas, Cataluña reciba 105.

Dichas fuentes eludieron pronunciarse sobre si variables como la dispersión y el envejecimiento, a las que apelan otras comunidades autónomas, deberían tenerse en cuenta a la hora de diseñar el modelo de financiación. "Nosotros no pedimos no contribuir, sólo pedimos justicia", insistieron.

Además de un "modelo claro, en el que esté todo incluido", este grupo parlamentario sitúa en los 3.800 millones de euros la cantidad anual que, en cumplimiento del Estatut, Cataluña debería recibir antes de tres años.

Finalmente, en cuanto a la fecha en la que quedará resuelto el modelo de financiación, las fuentes consultadas revelaron que Salgado mantiene la del próximo día 15. "Nosotros", replicaron, "no lo vemos tan claro".