El portavoz de Esquerra, Joan Tardá, ha mantenido esta misma mañana contactos informales con algunos diputados del Grupo Mixto pertenecientes a partidos de Galicia, País Vasco y Cataluña, que han acogido bien la iniciativa.

El primer objetivo de ese foro será promover un ámbito de diálogo distendido que sirva de impulso al proceso de paz y pedir a ambas partes gestos valientes que apuntalen la continuidad del proceso.

En esa línea, ERC cree que el Ejecutivo tendría que proceder cuanto antes al acercamiento de presos etarras a Euskadi. Cerdá reconoció que, aunque este paso no será absolutamente decisivo para lograr la paz, si será "un buen inicio" que además se ajusta a lo establecido en la Ley Penitenciaria.

Consideró que este tipo de iniciativas tendría que ir acompañadas de gestos por parte de la izquierda abertzale para propiciar un desbloqueo real de la actuación. Estos pasos permitirían "un acercamiento de posiciones políticas" que ahora están bloqueadas.

Esquerra entiende que los grupos nacionalistas del Congreso están "plenamente legitimados" para poner en marcha esta inicitiva, puesto que desde el primer momento han apoyado al Gobierno en esta materia y han mantenido su lealtad pese a la escasez de información que reciben del Ejecutivo.

"PISTA DE ATERRIZAJE"

El presidente del Grupo de ERC reconoció su preocupación por la marcha del proceso y dijo tener la sensación de que "ETA es como un avión sin combustible que esta pidiendo pista de aterrizaje y pide a la torre de control que alguien le dé pista, y es responsabilidad del Gobierno buscarle una pista de aterrizaje", porque en caso contrario "ETA se estellará".

Cerdá se mostró seguro de que, si en estos momentos gobernara el PP, "estaríamos ante una amnistía parcial" y reprochó al Ejecutivo su falta de iniciativa para reactivar el proceso.

Si sale mal, advirtió, "será un fracaso de la democracia, será un fracaso con responsables políticos y habrá habido responsabilidad en la oposición, habrá habido responsabilidad en el Gobierno y habrá hababido responsabilidad en la izquierda abertzale".

En esta situación, lo que pretende Esquerra es constituir un foro en el ámbito parlamentario que pueda dar "un tirón de orejas" a las partesy buscar complicidades para garatizar que este proceso sea irreversible. "No queremos llegar a un momento en que unos se echen la culpa unos a otros y que el conflicto permanezca", sentenció Cerdá.

Tardá insistió en que en ERC están "alarmados" por las informaciones que tienen a través de la prensa y dijo que el cumplimiento de la ley en materia de presos "sería un buen acicate para la paz" y los grupos minoritarios pueden ser "una gran palanca de impulso" de la paz.

ARRIESGAR

Cerdá reconoció que el acercamiento de presos no es la solución al parón del proceso de paz, pero dijo que contribuiría a ello como en "aquel anuncio" que proponía que "tacita a tacita" se acaba ahorrando "para comprar unos pendientes".

Al Gobierno le dijo que "hay que arriesgar un poco. Hay que arriesgar algo para que pase algo" porque, en caso contrario, "volveremos a la situación anterior y la sociedad no se lo puede permitir".

Si eso ocurriera, lo políticos "tendríamos que explicar a los ciudanos por qué no hemos aprovechado esta oportunidad" y por ello "nosotros vamos a hacer lo que esté en nuestra mano" para que el proceso no naufrague.

Para crear este foro, ERC no adoptará ninguna iniciativa parlamentaria concreta, puesto que "para crear un escenario de diálogo hay que hacerlo únicamente con disposición a dialogar", sentenció Cerdá.