Su portavoz en el Congreso de los Diputados, Joan Tardá, expresó en rueda de prensa el temor de ERC ante la sospecha de que el Gobierno "empieza a inetntar jugar" con esta formación política.

Tardá alertó al Gobierno de que su partido "no es ni mejor ni peor, pero sí distinto" de CiU, la única formación catalana con la que el PSOE ha alcanzado hasta ahora alianzas estables de Gobierno en el Estado.

Esa distinción se plasma, entre otras cosas, en que ERC quiere del Gobierno "cambios estructurales" en el Estado y "complicidades estratégicas" de la izquierda catalana con la española. "Si no es posible, que lo digan", espetó.

El PSOE, sentenció, "debe decidir a qué juega y con quién quiere jugar, pero no se puede estar en medio de la mesa y dar carta sólo a quien conviene". "Entramos en el segundo año (de legislatura) y hay que empezar a concretar estas alianzas, que para los independentistas catalanes son de gran trascendencia".

Tardá recordó que el presidente del Gobierno y el líder de ERC hablaron de una serie de "gestos", muchos de los cuales no se han producido.

Por ejemplo, Tardá prestó especial atención a la promesa del Gobierno de trasladar a Cataluña la sección del Archivo de Salamanca incautada durante la guerra civil.

Tres meses después de que el Ejecutivo anunciara esa intención tras un periodo de estudio, ERC ignora la marcha de las gestiones para materializar esa decisión, por lo que Tardá expresó la "inquietud" de su partido.

Por ello, han solicitado la comparecencia de la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, para que explique la marcha de esas gestiones.