Miquel Bofill ha trabajado durante meses con representantes de Ministerio de Justicia, del Consejo General del Poder Judicial, jueces mercantiles y los colegios profesionales de Cataluña implicados en la aplicación de los procesos concursales.

Fruto de estas reuniones, la moción recoge las principales carencias de la ley y solicita su modificación, "principalmente porque esta ley afecta al conjunto de las empresas y si esta ley funciona bien pueden sanearse muchas empresas y reciclarse cuando se producen situaciones de dificultades económicas", señaló el senador.

Según el parlamentario de la Entesa, "el procedimiento concursal está siendo utilizado por las empresas de una manera tardía, con poca o nula anticipación, con la agravación del estado de insolvencia y la dificultad para adoptar estrategias".

Un aspecto importante de esta moción se centra en los profesionales que intervienen en estos procedimientos que no siempre tienen garantizada una retribución adecuada, cosa que para Bofill "no es precisamente un estímulo para intervenir en ellos, más bien puede generar la renuncia a esta actividad y haría peligrar la supervivencia del nuevo sistema concursal y perpetuaría vicios del pasado".

La moción propone, en definitiva, una revisión del marco regulador vigente y la aplicación de nuevas medidas que aumente la confianza y el uso que los agentes económicos y sociales deberían realizar del procedimiento concursal.