Esquerda denuncia que mientras el voto de los ciegos y deficientes visuales no sea secreto, se produce una discriminación manifiesta en uno de los derechos políticos más importantes, y recuerda que la Constitución Española indica que el sufragio universal es personal, libre, directo y secreto.

Josep Maria Esquerda afirma recoger la inquietud de diferentes asociaciones de personas ciegas que demandan poder ejercer su derecho a voto sin ayuda de terceras personas que seleccionen la papeleta, con la consecuente pérdida de privacidad que ello supone.

La Entesa propondrá la posibilidad de votar con papeletas en braille o bien mediante voto electrónico. El senador de la Entesa se remite también a diversas iniciativas parlamentarias aprobadas en la presente legislatura para garantizar este derecho a los discapacitados visuales y propone una modificación del reglamento de la ley electoral, un trámite mucho más sencillo que cambiar el texto legal.