Con estas declaración pública, en el día que la Junta de Accionistas de Enersis decide si autoriza a la empresa española a aumentar su participación o no en ésta última, Endesa ha dejado claro que no aceptará ampliar su presencia, directa o indirecta, en la filial generadora si no es para asumir el control.

También deja claro su intención de no reproducir los errores del pasado, por los que se pagaron precios muy diferentes a los accionistas de Eersis, según de qué poder político tuvieran sus acciones, y que son el origen de los conflictos surgidos desde que el grupo español llegó a Chile.

La Junta de Enersis debe decidir hoy si autoriza a Endesa España a aumentar su participación hasta el 64%, mediante una oferta que supondría el desembolso de más de 200.000 millones de pesetas, con el fin de controlar uno de los grupos eléctricos más importantes de America Latina.

En su declaración de intenciones, los accionistas españoles de Enersis mntienen que su intención es hacer de la compañía chilena la clave de su crecimiento en Latinoamerica, lo que equivale a un compromiso industrial de permanencia y desarrollo de la empresa andina.

Igualmente, el grupo español señala que, de obtener el control de de Endesa Chile, tampoco reducirá su participación en Enersis, por entender que es lo más conveniente para todos los accionistas del grupo chileno.