Con este motivo, el portavoz socialista en al Comisión de Trabajo y Asuntos Sociales del Senado, José María Romero, defenderáen el próximo pleno una moción para instar al Gobierno a que, antes de determinar los criterios definitivos que condiciones la fusión, establezca una "interlocución directa" con las compañías que operan en el sector eléctrico, con las organizaciones de consumidores y las centrales sindicales, según informó el PSOE.

Romero argumentó su preocupación por las consecuencias de esta operación en que, a lo largo de los últimos años, se ha venido produciendo un proceso de concentración empresarial en el secto eléctrico, al mismo tiempo que se producía una liberalización del mercado eléctrico.

A este respecto, como objetivo prioritario de esta liberalización, Romero precisó que el Gobierno ha venido planteando el incremento de la competencia que debería conllevar la reducción de los precios medios de la electricidad y la mejora de la calidad en el servicio.

Por esta razón, el senador socialista considera esencial que, antes de dar la aprobación definitiva a la prevista fusión, quede garantizado el cumlimiento de dichos objetivos, así como la estabilidad de las distintas plantillas de trabajadores.