Burgaleta, que valoró positivamente el funcionamiento de los autobuses articulados, dijo que con estos dos vehículos más se mejorarán las frecuencias de paso entre coche y coche, y se atenderá el incremento del número de viajeros.

Los técnicos de la EMT estudiarán también la variación de la posición del cancelador situado en la plataforma central de los "gusanos", con elfin de facilitar el flujo de viajeros hacia el interior del autobús.

Otra de las posibilidades que estudia la EMT consiste en extender el acceso por la puerta central a los viajeros que lleven tarjeta de abono transportes, para reducir el tiempo de espera en las paradas y agilizar el servicio y aumentar la velocidad en la línea.

Los autobuses articulados de la línea 27, que entraron en funcionamiento el pasado día 23, fueron objeto de las críticas de los representantes de la Plataforma Sindical, entral mayoritaria en la EMT, que apuntaron una serie de problemas técnicos en los coches.

COLAS Y RETRASOS

Durante los primeros días, los usuarios se quejaron de que tenían que soportar largas colas, así como de las frecuencias de paso de los autobuses, que en algunos casos llegaron hasta la media hora.

Por su parte, Burgaleta dijo que estos problemas técnicos han sido superados y que la línea 27 "funciona en estos momentos a satisfacción de la empresa".

Explicó que los circuitos de televsión de los "gusanos" tampoco presentan problemas, después de que en los primeros días sufrieran desconexiones por las irregularidades del firme y del carril bus por el que circulan los coches.

Según Burgaleta, los trabajadores no se han quejado de la posible fatiga que supone conducir los autobuses articulados, dada su gran longitud y el mayor número de viajeros que transportan.