Entre enero y agosto de este año, las pérdidas del grupo ENA se situaron en 1.700 millones de pesetas, frente a los 2.530 millones del mismo período de 1991, lo que supuso un descenso del 32,8 por ciento.

Hasta finales de agosto, los ingresos de las empreas públicas de autopistas crecieron un 20 por ciento, hasta alcanzar los 6.130 millones de pesetas.

Los gastos financieros de las empresas públicas de autopistas ascendieron a 6.404 millones de pesetas, lo que significó un descenso del 16,4 por ciento respecto a los ocho primeros meses del año pasado.

Según los responsables del grupo ENA, esta reducción de los gastos financieros se debe a que el grupo ha llevado a cabo en los últimos años una fijación de su deuda, pasándola a renta fija y deuda eterna, por lo que no le afecta la reciente devaluación de la peseta y las turbulencias financieras de las últimas semanas.

El gasto corriente del grupo creció un 3,5 por ciento entre enero y agosto de este año, mientras que el excedente de explotación aumentó un 40 por ciento, alcanzando los 3.042 millones de pesetas.

Por empresas, Autopistas de Navarra fue la que más mejoró sus resultados económicos en los ocho primeros meses del año, un 70 por ciento, seguida con Autopistas del Atlántico (54 po ciento) y Autopista Astur-Leonesa (7 por ciento).

El presidente del grupo Ena, Antonio Rojo, informó que a finales de este año se cerrará la autopista gallega, conectando La Coruña con Santiago y Pontevedra, y se abrirá al tráfico siete meses antes de lo previsto el túnel de Barrios de León.

Aseguró que el recorte presupuestario no afectará al plan de inversiones en curso, cuyo presupuesto supera los 60.000 millones de pesetas.