Según apuntó la oficina de estadística este lunes, si se analiza el tamaño de las empresas, esta proporción alcanzó el 70% para las grandes empresas, en comparación con el 21% para las pequeñas y medianas empresas (pyme) a nivel comunitario.

Asimismo, Eurostat resaltó que las empresas pueden desempeñar un papel importante en la mejora de las habilidades de la Tecnología de la Información y la Comunicación (TIC) de su personal.

Por otro lado, en cuanto a la adopción de tecnología en las empresa, el 38,5% de las compañías en España lo utilizan de forma muy poco regular, seguido por el 33,1% que lo emplea de forma poco regular, 21,5% que lo usa de forma regular y 6,8% que lo maneja de forma muy recurrente.

Estos datos posicionan a las marcas españolas por encima de países como Italia, Portugal, Luxemburgo o Austria, pero muy alejados de Alemania, Finlandia, Dinamarca o Países Bajos, entre otros.

En cuanto a los usos más frecuentes, principalmente las grandes empresas y pymes españolas utilizan estas herramientas para almacenamiento en la nube (30%) y para implementar tecnologías basadas en Inteligencia Artificial (IA), con el 9,2%, cifra superior a la media de los Estados miembros de la Unión (8%).

Asimismo, Eurostat apuntó que, así como Internet se ha convertido en un punto central de la vida de las personas, las empresas están aumentando su presencia en línea y el uso de soluciones TIC para optimizar sus operaciones diarias.

En concreto, en la UE, casi todas las empresas (94%) tienen acceso a Internet de banda ancha. Esto se aplica independientemente del tamaño de la empresa, ya que el 94% de las pequeñas y medianas empresas y el 99% de las grandes empresas utilizaban banda ancha en 2023.

En el caso de España, el 63,7% de las compañías disponen de redes sociales, un 92,6% de las grandes empresas y un 62,8% de las pymes, y un 50,7% celebran reuniones virtuales (95,1% las grandes empresas y 49,4% las pymes).

En el caso del comercio electrónico, en 2023 España ocupaba la quinta posición a nivel de la Unión en esta clase de comercios, que ya suponía el 33,6% de las compras totales que se realizaron ese año.