Herrero pidió "algún signo que concrete un pacto de Estado que lleve a los partidos políticos a firmar todo lo que incumplieron el año pasado", en referencia al compromiso de varios grupos de pedir un 0,5 por ciento inicial para proyectos en el Tercer Mundo.

La lectura ocupa la mayor parte de una jornada habitual de este activista, que pasa los días estudiando informes sobre cooperación al desarrollo.

Juan Luis Herrero dispone de un despacho y una habitación cedda por la Institución Profesional Salesiana para realizar la huelga de hambre y aprovecha sus fuerzas para visitar a escolares y dar conferencias en colegios del barrio de Carabanchel Alto, de Madrid, en los alrededores del centro donde se ha instalado.

Esta es la cuarta huelga de hambre que realiza para llamar la atención sobre los problemas del hambre y el subdesarrollo en el Tercer Mundo: en 1993 realizó dos, una de 9 días y otras de 29; el año pasado, la última, de 14 días, en compañía de Pablo Oss y otros miembros de la Plataforma del 0,7 durante la acampada que se celebró en el Paseo de la Castellana de Madrid.