Las mismas fuentes explicaron que el vehículo había levantado las sospechas de la policía por llevar más de 30 horas estacionado en un recorrido por el que podría pasar Aznar y por "tener matrícula extranjera y tener mal instaladas las placas, que no eran las originales".

Ante esta sospechas y al no ser localizados los propietarios del vehículo, funcionrios de la policía procedieron a la apertura del maletero del coche utilizando para ello "un cañón de agua", que produjo daños en la cerradura del maletero, según las mismas fuentes.

Estas fuentes agregaron que la apertura del maletero de un coche es una "acción rutinaria" de la policía en los casos en que hay indicios que hacen sospechoso el vehículo.

Posteriormente, los propietarios del vehículo fueron localizados, y resultaron ser unos marroquíes emigrantes en Alemania que llegaron ayer a Melila y se dirigieron a un hotel de la ciudad" a pernoctar, dejando aparcado el coche.

Por otra parte, fuentes del Ministerio de Justicia e Interior señalaron a Servimedia que este departamento se encargará de pagar los gastos de reparación de los daños ocasionados en el vehículo.