Mayor Oreja calificó a Arzalluz de "insultador oficial de Euskadi" y reconoci que el medio de comunicación utilizado entre ambos es el insulto constante; por ello, le animó a cambiar de postura y acercarse a "la de un verdadero demócrata, que es la del debate".

En este sentido, le emplazó a mantener un debate entre ambos sobre los temas que eliga el propio Arzalluz, tanto generales como municipales.

Consideró que el debate abriría unas "pautas democráticas de futuro en esta tierra" que servirían para que el tiempo empleado en lanzarse insultos entre ambos se dedique a la iscusión de un modo ordenado.

Mayor Oreja aseguró no sentirse preocupado por los resultados de las encuestas, ya que, dijo, "la verdadera encuesta se realizará el 28 de mayo". Apostó por continuar trabajando "más que nunca, ahora que los resultados parecen favorables".

En este sentido, señaló que los buenos resultados que se predicen para el PP en algunos pueblos de Guipúzcoa es algo muy importante para su partido y que, para ello, hay que "unir fuerzas y, democráticamente, poder combatir al PNV"

A juicio del líder del PP, las elecciones del 28-M tienen una especial trascendencia para el futuro, tanto del País vasco como de España, ya que se configurará "un nuevo escenario político" que estará basado en dos ejes: el PNV y el PP como referente para los que no sean nacionalistas vascos.