La oferta popular completa figura en el libro-guía de campaña realizado por el PP bajo el lema "50 razones que nos impulsan a gobernar", compuesto por medio centenar de fichas que especifican sus soluciones para resolver los problemas de la sociedad española.

Las 50 fichas responden a preguntas como ¿cuánto nos cuesta el Estado?, ¿qué servicios nos da el Estado?, ¿estamos hoy mejor los trabajaores que en 1989?, ¿están mejor hoy las empresas?, ¿estamos más cerca de Europa? y ¿somos hoy más libres o nos invade el Estado?.

La guía, a la que tuvo acceso Servimedia y de la que sólo se ha hecho una edición restringida de 50 ejemplares,, expone también las "ideas fuerza" que cada candidato debe tener en cuenta para responder a las "andanadas" diálecticas de sus oponentes del PSOE.

En el terreno económico, los populares cifran en 550.000 millones de pesetas el coste de la reforma tributaria qe propugnan, que incluye un aumento sustancial de las deducciones fiscales a las inversiones.

Los populares propugnan una política presupuestaria basada en la contención de los gastos corrientes del Estado, sin aumento de los impuestos, la regularización de balances sin coste fiscal para las empresas y la prohibición de encadenar contratos temporales.

En agricultura y pesca, anuncian que mantendrán una postura de fuerza ante la CE, con la solicitud de cláusulas de salvaguardia para proteger el setor primario, partiendo de la base de que mientras un agricultor francés recibe más de medio millón de peseta en ayudas de la Comunidad al año, su homólogo español no llega a las 250.000.

La política de privatizaciones de empresas que baraja el PP afecta a Endesa, Renfe, Telefónica e Iberia, en tanto que su política de vivienda prevé triplicar en ocho años la aportación del Estado para facilitar el acceso de los españoles a una vivienda en propiedad.

Por lo que se refiere a la corrupción, los canidatos tienen orden de distinguir casos aislados, como el de Juan Hormaechea, que afecta al PP, y redes de financiación "tipo Filesa", que menoscaban la credibilidad del PSOE.

El PP es partidario de prohibir la libre designación en la Administración para puestos de rango inferior al de director general, impedir que la mayoría parlamentaria pueda vetar la constitución de comisiones de investigación y garantizar que el fiscal general del Estado sea una persona independiente que no milite en ningún partio.

En cuanto al terrorismo, los populares mantendrán una negativa cerrada al "diálogo o la negociación" con ETA, promoverán el cumplimiento íntegro de las condenas y estimulará al ministerio fiscal para que persiga las conductas de encubrimiento o auxilio a los terroristas.

TODAS LAS DROGAS SON DURAS

El PP quiere suprimir la distinción entre "droga dura" y "droga blanda", ilegalizar el consumo de todas ellas, y permitir a los jueces la sustitución de la pena a los toxicómanos por un tratamientoy posterior reinserción.

En el terreno social, el programa del PP ofrece la gratuidad de los anticonceptivos expedidos por la Seguridad Social, pagar el sueldo íntegro de la mujer de baja por maternidad, ampliar la pensión de orfandad hasta 25 años, la reserva el 5 por ciento de las plazas de funcionario para minusválidos y limitar los permisos de trabajo a los inmigrantes.

En el área educativa, el PP aboga por la gratuidad de enseñanza desde los 3 a los 18 años, lo que exigirá dedicar a este conepto el 6 por ciento del PIB, y otorgar a cada universidad el derecho a establecer sus propios sistemas de selección de alumnos.

La potenciación de la enseñanza en el ámbito de las empresas se realizará mediante la consideración fiscal de inversiones para el dinero asignado a este fin. El gasto en investigación y desarrollo alcanzará el 2 por ciento en el año 2.000.

En el terreno de la comunicación, el PP quiere modificar el Estatuto de RTVE para, según afirma, garantizar su neutralidad. Además, uprimirá las barreras para el desarrollo de los canales privados de radio y televisión.

30 MILLONES DE CARTAS

Por otra parte, el PP remitirá en los próximos días una carta de José María Aznar a 30 millones de españoles para explicarles su programa, según informó a Servimedia un colaborador del Partido Popular.

La misiva tendrá tres modalidades distintas en función de la edad del destinatario. La dirigida a los más jóvenes hará hincapié en los problemas del primer empleo, la droga y las becas deestudio. La de jubilados y personas mayores se centrará en los problemas de las pensiones. La dirigida al resto de la población hará un repaso crítico general de la situación de España.

El PP se gastará 600 millones de pesetas en la propaganda por correo, dentro de un presupuesto de la campaña que asciende a 1.800 millones de pesetas.

Para financiar ese gasto, los populares han contraido un préstamo sindicado con los bancos BBV, Central Hispano y Popular por un importe de 1.500 millones de peseta, según informaron las mismas fuentes.

De otro lado, la dirigente del PP Isabel Tocino declaró hoy que, si de ella hubiera dependido, Juan Hormaechea "no hubiera sido nunca militante del Partido Popular".

Lamentó que la campaña electoral se esté centrando en "temas de este calibre" y afirmó que "utilizar casos de corrupción, incluido Filesa, que es la verdadera trama de la corrupción, de una manera electoral, no va a aportar nada a este país".