Dicho informe denuncia el talante "autoritario y prepotente" del Ejecutivo que presidía Manuel Fraga, que fue "impermeable a las propuestas críticas de los grupos ecologistas, llegando incluso a despreciarlos".

En opinión d la AGENG, el Gobierno de Fraga representó fielmente el modelo desarrollista de los años 60, "caracterizado por la absoluta falta de respeto a los valores naturales y del ambiente cuando se trata de buscar el desarrollo económico".

A juicio de las cerca de 40 Asociaciones integradas en la AGENG, el Ejecutivo gallego "despreció, y renunció a la defensa de los valores naturales y paisajísitcos identificativos de Galicia, iniciando una brutal carrera de destrucción de nuestras señas de identidad y de lo ue atañe a toda la relación del hombre rural con el entorno".

En este sentido, los ecologistas citan como ejemplo a las "abrasadoras concentraciones parcelarias" de la comarca orensana de La Limia.

Los ecologistas gallegos concluyen su crítico informe afirmando que la continuación del Gobierno del PP significaría, probablemente, "abrir de nuevo las puertas a otra etapa de degradación ambiental, si cabe, aún más violenta y generalizada".

Por ello, piden a los electores un voto reflexivo que cmpare previamente progrmas pero que también tenga en cuenta la práctica del Gobierno en esta materia.