Durante un acto electoral en el que participó junto a Nicolás Redondo Terreros y su padre, Borrell insistió en que las elecciones del próximo domingo permitirán elegir al pueblo vasco entre un proyecto de izquierdas o uno de derechas, representado este último, dijo, por el PP y el PNV.

En su opinión, los nacionalistas vascos han venido siendo en los últimos dos años el "más firme puntal de la derecha en Madrid", razonamiento con el que quiso distanciar el mensaje del PSO del que está lanzando el PP en esta campaña electoral.

Asimismo, advrirtió a todos aquellos que interpretan la posición del PSOE en esta campaña en clave de nacionalismo español que se equivocan y afirmó que la defensa de la Constitución y del Estatuto de Autonomía no signifca la formación de un frente antinacionalista.

Para Borrell, una victoria abultada de los nacionalistas supondría una incursión por "un camino peligroso que está en la mano de todos evitar". Subrayó, además, que no siente la ecesidad de pedir perdón o permiso a nadie por participar en la campaña vasca, ya que, aseguró, lo hace en representación de millones de españoles que consideran que subsanar el problema de Euskadi es solucionar el futuro de España.