En la plaza de toros de la capital malagueña, ante unas 10.000 personas, Aznar añadió a su ya tradiconal discurso de la cohesión y regeneración nacional el factor de la "cohesión social".

"Los derechos de un español", señaló, "nunca deben ser confundidos con un favor del Gobierno. Una cosa son los derechos y otra los favores. Una cosa es emplear el dinero público para satisfacer las necesidades y otra para hacer clientelas electorales a costa del interés de los españoles".

José María Aznar se preguntó, en una tierra como la malagueña, afectada por un alto índice de paro y desempleo rural, "¿quémejor solidaridad que tener la oportunidad de un trabajo?".

Aunque en esta ocasión el presidente del PP evitó utilizar términos como competitividad, sí siguió el hilo que viene utilizando en toda esta campaña de "sacar España adelante" y "potenciar siempre las políticas de cohesión".

El líder popular afirmó que hay muchos españoles que se preguntan para qué está sirviendo esta legislatura en la que "ni se administra ni se gobierna y lo único que se hace es intentar salvar la cara y llenar España e gobiernos y escombros".

En su línea de duras críticas al Gobierno, insistió en que el Ejecutivo ha renunciado a hacer política para España en su conjunto y ofreció como alternativa la de un partido, el PP, que "viene a hacer una gran renovación de la vida nacional". "Quien no entienda que ha nacido una nueva ambición en España no comprenderá lo que pasa y va a pasar en España", apostilló.

EX VOTANTES DEL PSOE

En Málaga, tradicional feudo del socialismo español, Aznar concluyó haciendo una llaada a antiguos votantes del PSOE para pedirles que "reflexionen" sobre la posibilidad de sumarse a la posibilidad de cambio que representa el PP".

En referencia a la política malagueña, el líder popular advirtió que si PSOE e IU pactan tras el 28 de mayo para que Eduardo Martín Toval (PSOE) o Antonio Romero (IU) sean alcaldes, eso no funcionará. "Con eso, hoy en día en el mundo no se va ni a la vuelta de la esquina", recalcó.

Por su parte, la candidata del PP a la alcaldía malagueña, Celia Villalbos, tuvo palabras de recuerdo para el candidato a la alcaldía de San Sebastián, Gregorio Ordóñez, asesinado por ETA el pasado 23 de enero, a quien calificó de "gran compañero".

Villalobos dijo que José María Aznar "tiene lo que tiene que tener" y se comprometió a que si resulta elegida alcaldesa exigirá al presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, "lo que nos ha quitado".

En referencia a un problema como la droga, que golpea duramente en la ciudad malagueña, la aspirante a la alcaldía idió a narcotraficantes y 'camellos' que no le voten "porque voy a ir a por vosotros".

Por su parte, Javier Arenas, presidente del PP en Andalucía, insistió en que no va a contestar a las acusaciones de los socialistas. De Alfonso Guerra afirmó que "no tiene categoría para que le conteste el PP", afirmación que levantó una cerrada ovación, mientras que del vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, aseguró que se sitúa fuera de la Constitución cuando manifiesta que una posible victoria del PP enfrentaía a las dos Españas.

Añadió que la UCD dio un ejemplo de alternancia cuando en 1982 cedió el poder a los socialistas y reclamó a éstos el derecho del PP a que el PSOE le dispense "esa misma alternancia".

"Vamos a ganar a la arrogancia. Los únicos que meten miedo son los caciques. Se puede ser cacique si uno se aprovecha de su situación política y del poder absoluto. Andalucía tiene unos nuevos caciques en algunos socialistas", subrayó.