El candidato de CiU reconoció que las manifestaciones de Aznar le habían dolido y se preguntó si significaban que era el dueño de España. "o queremos comprar España, la queremos construir entre todos porque es de todos", añadió.

El número uno de la lista de CiU comentó que no entendía por qué el PSOE y el PP temen que la coalición sea una fuerza decisiva tras las elecciones y que, a su juicio, el debate televisado del próximo lunes entre Aznar y Felipe González servirá "para decidir quién nos necesita a nosotros".

Miquel Roca, que se disculpó por haber manifestado ayer que CiU "destrozaría" a los socialistas en Cataluña, expresión qe atribuyó a la euforia del primer día de campaña, dijo: "Pedimos para los demás el mismo respeto que nos niegan a nosotros".

Roca manifestó en un acto electoral celebrado ayer por la noche en el barrio de Sarrià de Barcelona que los que interpretan la voluntad de CiU de decidir en la gobernabilidad del Estado como un chantaje "buscan negar a los catalanes el derecho reconocido a los ciudadanos de cualquier otro punto del Estado".

Asimismo, se refirió al presidente de Extremadura, Juan Carlos Rodíguez Ibarra, y a sus ataques a Cataluña, y comentó que "diga lo que diga, no nos hará perder nuestro respeto por Extremadura y los extremeños, que bastante pena tienen de tenerlo a él de presidente".

El candidato de CiU explicó que el programa de la coalición era un compromiso para la regeneración del Estado con el fin de cambiar la mentalidad de recelo hacia los nacionalistas y aseguró que seguiría siendo una garantía de estabilidad.