En declaraciones a Onda Cero, Encis justificó su decisión de no ceder terrenos municipales para la construcción de un campamento provisional para los trabajadores inmigrantes. "Yo simplemente hago lo que los ciudadanos están demandando", dijo.

"Los ciudadanos han creado una plataforma y han hecho una primera entrega de 8.500 firmas en las que se niegan a la construcción de cualquier tipo de albergue o campamento", afirmó el edil. "Ante esta negativa de los ciudadanos, mi obligación es negarme a todo ello, no vaya a ser que eso traiga u nuevo estallido social".

Según Enciso, "el Ayuntamiento de El Ejido no puede asumir una avalancha (de inmigrantes) al amparo de la nueva Ley de Extranjería. Aquí hay una responsabilidad de otras administraciones con competencias en vivienda, como la Junta de Andalucía, que no ha querido escucharnos. Pero es que ni los propios ayuntamientos socialistas quieren ahora ninguno de esos cuatro campamentos que la Mesa de Inmigración ha acordado repartir en el poniente de Almería. Por tanto, no crucifiquemosni al ayuntamiento ni al pueblo de El Ejido como racista".

El alcalde lamentó que se perdiese "una oportunidad de oro el día de la peregrinación de los políticos, y todo por culpa de la oposición y los sindicatos. La actitud del señor Pérez Saldaña (consejero de Bienestar Social de la Junta de Andalucía) fue indignante".

En su opinión, "las ONG y la Junta de Andalucía han tenido actitudes nefastas y les decían a los inmigrantes que no se fueran de aquí, que les diéramos una casa. Quien siembra vintos recoge tempestades, y lamentablemente se ha estado jugando con los inmigrantes desde la Junta y las ONG".