La Fundación para el Progreso de Madrid, entidad sin ánimo de lucro y centro de análisis y estudios sobre los problemas de Madrid, lleva por quinto año consecutivo editando el "Catálogo de Buenas Prácticas y Guía de Horrores Urbanos", que recoge lo mejor y lo peor que ha ocurrido en Madrid y su región en materia territorial, urbanística, arquitectónica, medioambiental o de impacto social.

En 2005, el que peor parado sale en este Catálogo, en el que han participado cien técnicos, profesionales y estudiosos, es el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, del que dependen la mayor parte de las 70 grandes obras iniciadas simultáneamente en la capital sin planificación territorial ni temporal, las más importantes las de la M-30 y las del túnel entre Atocha y Nuevos Ministerios, estas últimas del Ministerio de Fomento.

Para el presidente de la Fundación para el Progreso de Madrid, Francisco Herrera, que presentó la guía, todas estas obras son "una puñalada en el corazón de la ciudad" y han convertido a la capital en "una Bosnia-Herzegovina en el momento crítico de la guerra de los Balcanes".

A juicio de Herrera, "la planificación urbanística se ha sustituido por la planificación electoral, para que todas las obras estén terminadas antes de mayo de 2007", y esta situación "ha acabado con la calidad de vida de todos los madrileños, por lo menos estos cuatro años".

La construcción del anillo de túneles bajo los cuatro rascacielos que se levantarán en los terrenos de la antigua Ciudad Deportiva del Real Madrid, en la Castellana, en los que el ayuntamiento gastará 100 millones de euros, es el segundo de los horrores de 2005, al que sigue la instalación de una central térmica en Morata de Tajuña.

A continuación, las iniciativas más infames acometidas en Madrid son el abandono por parte del ayuntamiento de la capital del proyecto de Dehesa Olímpica tras caerse la candidatura olímpica de Madrid 2012; los más de 20.000 árboles que se habrán talado cuando finalicen las obras de la M-30, que es como si hubiera pasado un Katrina por Madrid, según Herrera, y el fracaso del Plan de Acción del Centro, porque el centro de la capital "está peor que nunca".

Cierran el catálogo de horrores de la Fundación para el Progreso de Madrid el plan para cerrar la M-50 con un túnel bajo el Monte de El Pardo, los desarrollos urbanísticos en el Molar y en Manzanares el Real, y el invento del Gobierno de Gallardón de la "Marca Madrid", que, a juicio de Herrera, es un eslogan "invisible, irrelevante e intranscendente".

LO MEJOR DE 2005

En el lado opuesto, dentro del Catálogo de Buenas Prácticas, el primer puesto se lo lleva el documento aprobado por el Gobierno regional para la declaración del Parque Nacional de Guadarrama, que cuando se lleve adelante marcará "un antes y un después en la historia de Madrid", en opinión de esta Fundación.

La creación de la Asociación Madrid Plataforma Logística, que puede convertir a Madrid en el centro logístico del Sur de Europa, en opinión de Herrera, es la segunda mejor iniciativa de 2005. Por detrás se sitúan la entrada en funcionamiento de la depuradora de La Gavia, la "Operación Campamento", el proyecto de ampliación de Mercamadrid y la remodelación de la Plaza de Santo Domingo.

Entre las diez mejores buenas prácticas acometidas en la capital y en la región madrileña figuran también la restauración de los frescos de Goya en la ermita de San Antonio de la Florida, la rehabilitación de las Escuelas Pías de San Antón, el anuncio de la restricción al tráfico y la limitación del comercio mayorista en Lavapiés y el Museo de escultura al aire libre de Leganés.

El presidente de la Fundación para el Progreso de Madrid insistió en que el año 2005 tiene un particular interés, sobre todo para la capital, ya que se está definiendo su futuro urbanístico. Destacó que el Catálogo de Buenas Prácticas y Horrores de este año es el más "alarmante y desequilibrado" de los realizados hasta ahora, ya que lo malo pesa más que lo bueno y las iniciativas más infames afectan a todos los madrileños.