Esta es una de las medidas contempladas en una proposición no de ley presentada ante el Congreso de los Diputados para su debate en comisión, en la que también proponen el aplazamiento de las pruebas de aptitud física de las aspirantes embarazadas hasta tres mees después del parto, reservando la puntuación obtenida en las pruebas técnicas.

Los socialistas pretenden también la revisión "inmediata" de la resolución por la que se negó la renovación de servicios a la militar Ana María Santos Jiménez dentro de la Brigada de Infantería Ligera Aerotransportable de Vilaboa.

Durante un encuentro con periodistas, el secretario general del Grupo Socialista, Jesús Caldera, reiteró la existencia de "comportamientos discriminatorios" detrás de la negativa de los manos a renovar este contrato, al estar embarazada la afectada, algo que ha negado de forma reiterada el Ministerio de Defensa.

Para evitar casos similares, piden que se tenga en cuenta "escrupulosamente" el expediente profesional del interesado, además del informe del jefe de la unidad, "especialmente cuando concurran circunstancias que requieren velar por el principio de igualdad de trato y de interdicción de arbitrariedad".

A juicio de los socialistas, la garantía frente a una eventual subjetividd, arbitrariedad o discriminación en el proceso selectivo reside en la necesidad de valorar el expediente profesional, sin primar las "apreciaciones directas", como ocurrió en el caso de Ana María Santos.

"En el caso de la militar que motiva el interés de esta iniciativa parlamentaria, ningún dato objetivo de su expediente, que no contiene ninguna anotación negativa, establece calificación o evaluación alguna que pudiera servir de base para contrastar o comprobar la opinión desfavorable de su mando", segura el PSOE en la exposición de motivos de la proposición.