En su comparecencia ante la Comisión de Defena del Congreso para explicar los presupuestos del ministerio, Torre de Silva mostró su intención de abordar durante lo que queda de 2003 y en 2004 el asunto del reservismo voluntario, que "hoy por hoy no existe" en el Ejército español.

El subsecretario explicó que la figura del reservista voluntario "supone un cambio de concepto: un militar a tiempo parcial, es decir, un señor que está integrado en sus actividades ordinarias laborales o administrativas y que durante cortos espacios de tiempo viene a ls Fuerzas Armadas y pasa a tener la condición de militar".

Así, antes de que acabe el año se materializará la convocatoria de 1.000 plazas de reservistas voluntarios, con la intención celebrar las pruebas, seleccionar a los reservistas y proceder a las primera incorporaciones para formación durante los últimos meses de 2003 y el año 2004.

Para afrontar las retribuciones del personal reservista voluntario que ingrese como consecuencia de esta convocatoria se han reservado en torno a 2 millones de uros en el presupuesto de 2004, según Torre de Silva.

El subsecretario descartó que la puesta en marcha del reservismo voluntario tenga que ver con la falta de efectivos en las Fuerzas Armadas, sino que se pretende ganar en "calidad", a través de "las capacitaciones profesionales de algunas personas" que tienen una "singularidad" que puede ser beneficiosa para el Ejército.

"Los problemas de falta de efectivos no los vamos a resolver con la reserva voluntaria, ni se pretende", añadió.

En estesentido, Torre de Silva argumentó que la rebaja introducida en los Presupuestos Generales 86.000 a 80.000 en número máximo de soldados previstos para los ejércitos responde a la pretensión de que "la distancia con la cifra real (en torno a 75.000 efectivos) no sea tan grande".

En cualquier caso, recalcó que la cifra de 80.000 militares profesionales de tropa y marinería "no es un objetivo" del Ministerio para alcanzarse a final de 2004, sino "un tope" en la reserva presupuestaria.