La compañía suministrará en concreto proyectiles de 155 m de altas prestaciones, dotados de unidad ‘base bleed’, propulsión por carga modular y espoleta electrónica EC-102. El alcance de esta versión ronda los 40 km.

Este es el mayor pedido de munición de 155mm de los últimos años con mucha diferencia. El contrato recién formalizado se enmarca dentro del acuerdo marco de munición de este calibre que el Ejército de Tierra y la compañía cerraron en 2018. El acuerdo con un presupuesto inicial de 48 millones de euros finalizaba en 2022, si bien, las condiciones incluían una prórroga de dos años.

Los proyectiles llegarán al Ejército en cuestión de pocos meses. Las resoluciones publicadas en la Plataforma de Contratación no mencionan el número de disparos adquiridos, solo indican que el suministro de los proyectiles se producirá antes de final de este año. Un plazo muy corto si tenemos en cuenta por el importe del contrato que la empresa proveerá miles de unidades.

La entrega se producirá en los polvorines de Ibeas de Juarros (Burgos), Vacar (Córdoba) y San Gregorio (Zaragoza), seleccionados por el Ejército de Tierra para este acuerdo marco.

Por otra parte, Tierra, a través del MALE (Mando de Apoyo Logístico del Ejército), ha cerrado con Expal un segundo contrato de menor importe, 6,2 millones, para el suministro también de munición de 155 mm, aunque en este segundo caso, no se especifica que sea de alcance extendido. El plazo de entrega es el mismo. Por lo tanto, el pedido final supera los 46 millones entre los dos contratos.

MAYOR ALCANCE

Expal ha anunciado recientemente el inicio de los estudios para el desarrollo de proyectiles RAP (Rocket Assisted Projectile) y VLAP (Velocity Enhanced Artillery Projectile) de 155mm con alcances de entre 60 y 80 km.

El punto de partida es el proyectil ER02A1 de la compañía, en servicio en el Ejército de Tierra, con mejoras aerodinámicas y mayor resistencia que permite llegar a los 30 km y con el ‘base bleed’, un desarrollo propio también, hasta casi los 40 km.