LA EJECUTIVA DE UGT CONVOCA A UNA REUNION A TODAS LAS FEDERACIONES PARA SOLUCIONAR LA CRISIS INTERNA

- El sector "crítico" se reunirá la próxima semana para fijar su estrategia

MADRID
SERVIMEDIA

La Ejecutiva de UGT no ha querido hoy tomar medidas contra los tres disidentes y s ha limitado a acordar la convocatoria de un Consejo Confederal para la primera semana del mes de febrero en el que se analicen los problemas internos que sufre la dirección del sindicato.

Según un comunicado difundido a primeras horas de esta tarde, la Ejecutiva ha ratificado su decisión de pedir la dimisión a los secretarios de Acción Sindical, José Luis Daza, y Acción Social, Gustavo Gardey, y la vocal Dionisia Muñoz, que en el anterior comité confederal de UGT actuaron en contra de lo que previamete había aprobado por unanimidad la Ejecutiva.

Pese a que Cándido Méndez barajó la posibilidad de quitar sus funciones a los disidentes después de que anunciaran su decisión de no dimitir, no ha sido así y la Ejecutiva sólo ha acordado convocar al Consejo Confederal, un órgano en el que están representados también los dirigentes de las federaciones y uniones territoriales de UGT, pero que sólo tiene carácter consultivo y no puede tomar decisiones.

Hasta el reunión del Consejo Confederal, Méndez sguirá en los próximos días reuniéndose con los secretarios generales de las federaciones y uniones territoriales. Ayer lo hizo con los críticos Manuel Fernández "Lito" (Metal) y Manuel Garnacho (Construcción), y, según informaron hoy a Servimedia fuentes sindicales, el viérnes lo hará con el dirigente de UGT-Cataluña, José Alvarez.

REUNION DE LOS CRITICOS

Mientras tanto, el sector "crítico" de UGT, que en el pasado Congreso Confederal defendió a "Lito" como candidato a la secretaría general del sindcato, tras tras la marcha de Nicolás Redondo, parece estar reorganizándose.

Fuentes solventes han asegurado a esta agencia que la próxima semana, posiblemente el lunes, hay prevista una reunión en Barcelona entre "Lito", José Alvarez, Manuel Garnacho o algún responsable de su federación y dirigentes de UGT de Asturias y de Cantabria, que son la estructura del sector crítico.

Al parecer, en esta reunión se hará un balance de la crisis abierta en la dirección del sindicato y fijarán una estrategia e actuación. Este sector del sindicato considera que la crisis de la dirección de UGT "es un problema que ha generado Cándido y los que le apoyaron y nosotros estamos a verlas venir".

Desde el sector "crítico" del sindicato, la resolución adoptada hoy por la Ejecutiva se entiende como una forma de ganar tiempo para intentar buscar apoyos a Méndez. A su juicio, Méndez quiere presionar a los responsables de federaciones y uniones en las reuniones que está manteniendo para ganar apoyos y "ponerlos cara acara" en el Consejo Confederal de febrero.

Según fuentes de este sector, Méndez intentará buscar en el Consejo Confederal una salida pactada a la crisis abierta por los disidentes para "ganar tiempo" hasta junio, cuando se reunirá el Comité Confederal, que es el que puede decidir el cese de Daza, Gardey y Muñoz con el apoyo de dos tercios de sus miembros.

Si no consigue los apoyos en el Consejo Confederal, Méndez, pese a que es reacio a ello, podría verse obligado a convocar un Comité Confederal xtraordinario. En el anterior Comité la gestión de Méndez y su Ejecutiva contó con un respaldo del 59,7 por ciento de sus miembros.

(SERVIMEDIA)
17 Ene 1995
NLV