Lo hizo en declaraciones a Radiocable nada más revelar el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, en una rueda de prensa en el Palacio de la Moncloa, que Sánchez y Robles también sufrieron en sus teléfonos móviles intrusiones del programa Pegasus, con el que supuestamente se espió a más de 60 independentistas catalanes y vascos.

Matute, queriendo "ser cauto" por la novedad de este anuncio, interpretó que la noticia "revela que la gravedad que suponíamos al escándalo Pegasus no era infundada", más allá de que haya quien pueda utilizarlo "en términos de rentabilidad política".

Ahora bien, apuntó que hay "un elemento que chirría un poco" y es que en teoría el programa Pegasus sólo se vendía a estados y ahora "se nos sugiere la posibilidad de un agente exterior al propio Estado". Por eso, dejó caer que el Gobierno debería "aclarar sin margen para ningún atisbo de duda que eso no pueda ser parte de eso que llaman las cloacas del Estado", que tendrían "un funcionamiento autónomo e independiente del Gobierno" de turno.