Ruiz Polanco ha rechazado la petición de la defensa de los denunciados, que le habían pedido que se inhibiese a favor de un juzgado ordinario, por considerar que no era competente para investigar los hecho denunciados por Interior.

Además, según la defensa de los cuatro denunciados, sólo se puede hablar de denuncia falsa si un tribunal dice que no hubo torturas. Se da la circunstancia de que el director de "Egunkaria", Marcelo Otamendi, reiteró en los juzgados de Plaza de Castilla que había sido objeto de malos tratos por parte de la Benemérita.

Otamendi, así como Ignacio Uría, Javier Alegría y Javier Oleaga, fueron denunciados por el Ministerio del Interior por haber dicho que sufrieron torturas or parte de la Guardia Civil, tras ser detenidos el pasado mes de febrero en relación a la presunta vinculación entre el citado diario y la banda terrorista ETA.

Según la denuncia, las manifestaciones realizadas por estas personas en distintos medios de comunicación pueden ser constitutivas de delitos de calumnias e injurias contra la Guardia Civil y de denuncia falsa y de obstrucción a la justicia, todos ellos con fines terroristas, así como de un delito de colaboración con banda armada.

Interio presentó como prueba ante el juzgado de instrucción de la Audiencia Nacional un manual de ETA intervenido al "comando Araba" en 1998, en el que se dan instrucciones muy precisas a sus militantes para que denuncien torturas después de cada detención.

El departamento de Acebes considera que, además de injuriar y calumniar a la Guardia Civil, estas cuatro personas han cometido un delito de colaboración con banda armada al seguir las instrucciones incluidas en los manuales de ETA.