Este es uno de los principales argumentos utilizados por las centrales sindicales para rechazar este contrato, ya que a su juicio este elemento de lareforma laboral no iba a contribuir al empleo, "al sustituir las empresas al padre por el hijo".

Sin embargo, Elordi rechazó este argumento y dijo que "un empresario es un hombre responsable, que tiene puesta una inversión y le quiere sacar un rendimiento. No pierde de vista que si tiene un trabajador formado y le funciona bien, no va a renunciar a él por ahorrarse unas pesetas".

En su opinión, "sería tirar piedras contra su propio tejado" el iniciar este proceso de sustitución de trabajadores fomados por jóvenes sin experiencia, pues iría en detrimento de la calidad de los bienes y servicios que produce.

El director general del INEM recordó que en los cuatro primeros del año se han doblado las previsiones del Ministerio de Trabajo al crearse más de 70.000 contratos de aprendizaje, con un "efecto sustitución mínimo". La previsión para finales de año es que éstos alcancen los 200.000.

El retrato robot de quienes se acogen a este tipo de contratos es: joven de 16 a 25 años, mujer (en un 60por ciento) y con una remuneración más cercana al salario convenio que a lo fijado por el decreto, según Elordi.

Los sectores que más ofertan trabajo para aprendices son el comercio y el turismo, y en el primero, las grandes superficies comerciales han recurrido a éste con frecuencia. Por comunidades autónomas, Andalucía es la que ha registrado el mayor número de contratos de aprendizaje.