Pérez aseguró, no ostante, que la economía apunta síntomas de recuperación y un comportamiento del empleo que hacen alcanzables los objetivos del Gobierno para el conjunto del año (3 por ciento de crecimiento del PIB y 76.000 puestos de trabajo netos).

También se mostró convencido de que será posible reencauzar el déficit del Estado, a pesar de que en los cuatro primeros meses se situó en 655.100 millones de pesetas, lo que supone un incremento del 53,9 por ciento respecto al mes de abril.

El déficit es resultado d un aumento del 6,6 por ciento en los ingresos y del 11,5 por cien en los pagos. En el capítulo de ingresos, destaca la fuerta caída, del 48,3 por ciento, en la recaudación del Impuesto de Sociedades, a causa el peor resultado de las empresas y el incremento de las devoluciones.

Según Pérez, el escaso aumento de los ingresos responde, sobre todo, a la reducción de las retenciones del IRPF y al aumento de las participaciones de los fondos de inversión, que se benefician de fuertes desgravaciones fiscals.

En cuanto a la evolución de los precios, Pérez afirmó que el Gobierno confía en que el dato del mes de abril, que se hará público mañana jueves, no supondrá una "sorpresa negativa" sino el inicio de una fase de moderación que permitirá situarlo en el 5 por cien a fin de año.

RECUPERACION INTERNACIONAL

El secretario de Estado dijo que el inicio de la recuperación de la economía española está en puertas, ya que podrá "engancharse" a la reactivación internacional que ya ha empezado a notarse enEstados Unidos y Japón.

Adujo que los últimos indicadores de actividad confirman la buena marcha del sector servicios, especialmente el transporte y el turismo, y apuntan señales esperanzadoras en la industria, como el incremento de más del 3 por ciento durante el primer trimestre en la inversión en bienes de equipo, frente a las tasas negativas del 91.

El sector que peor evoluciona es la construcción, donde en los dos primeros meses ha caído el consumo de cemento y la licitación oficial de obraspúblicas, pero también en este caso Pérez auguró un cambio de tendencia.

En su opinión, la construcción podrá recuperarse, gracias al Plan de la Vivienda y a la autorización al Ministerio de Obras Públicas y Transportes para que contrate obra pública con cargo a los Presupuestos del Estado de 1993.

Pérez valoró de forma moderadamente positiva la evolución de los salarios en los tres primeros meses del año, al señalar que crecieron menos que en el 91. Los convenios firmados afectaban a 1.907.000 tabajadores y establecían una subida media del 7 por cien.

El secretario de Estado también consideró positiva la evolución de la balanza comercial y restó importancia al aumento de las entradas de capital a corto plazo en el primer trimestre. Atribuyó el fenómeno a la liberalización de movimientos de capitales a partir de febrero, lo que también ha producido una mayor solicitud de créditos de empresas españolas al extranjero.