El coordinador general de la CEPA, Francisco Casero, denunció en rueda de prensa el carácter centralizado de la política hidráulica ejecutada por el Ministerio de Obras Públicas, Transporte y Medio Ambiente que, a su juicio, está manipulada por su titular, José Brrell.

Casero dijo que Borrell utiliza la política hidráulica como una política de pantalla para hacerse con el control de los trasvases en todo el país. El dirigente ecologista lamentó la falta de seriedad del Gobierno Central y del andaluz en materia de agua y advirtió que sus respectivas estrategias pueden desencadenar una guerra del agua en Andalucía.

La CEPA pidió a los grupos políticos que dejen de usar la sequía como un arma electoral arrojadiza por considerarlo una grave irresponsabilidaden un momento de sequía extremo.