LOS ECOLOGISTAS SE MOVILIZARAN CONTRA EL CIERRE NORTE DE EL PARDO Y POR LA MEJORA DEL TRANSPORTE PUBLICO
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Los ecologistas se movilizarán "a corto plazo" para protestar por el proyecto de cierre norte de la M-40 a su paso por el onte de El Pardo aprobado por el MOPU y para que el presupuesto de esta obra se destine "a la ampliación y mejora de las cercanías de Renfe", según informó hoy la Asociación Ecologista de Defensa de la Naturaleza (Aedenat).
Los responsables de la organización ecologista aseguraron que la M-40 potenciará el uso masivo del vehículo privado, "colaborando a incrementar aún más los ya de por sí elevados niveles de contaminación atmosférica".
Según Aedenat, el tráfico rodado es el responsable del 85 po ciento de la polución de Madrid. "Además", añadieron, "colabora a la aceleración del efecto invernadero y del cambio climático con los aportes de dióxido de carbono a la atmósfera".
Los ecologistas descalifican la declaración de impacto ambiental de la Secretaría General de Medio Ambiente (SGMA) del MOPU sobre el cierre de la M-40, por considerar que este organismo carece de credibilidad "a la hora de realizar declaraciones de impacto ambiental, al depender directamente del Ministerio que promueve laobra objeto de dicha declaración".
"Es claramente significativo", agregaron, "que el máximo organismo responsable en materia de medio ambiente declare que 'la solución propuesta en el documento técnico es la A4 (coincidiendo con la tapia del Monte de El Pardo), más viable técnica y económicamente que la A1 (por avenida de Valdemarín), cuya valoración, aún teniendo menor afección ambiental contempla, sin embargo, significativos inconvenientes sociales durante su ejecución'".
Aedenat prevé que las bras destruirán 3.000 encinas de porte arbóreo y unas 9.000 de porte arbustivo, "vegetación en ningún caso recuperable", y provocarán la extracción de unos 700.000 metros cúbicos de escombro.
Asimismo, reiteraron su oposición a la realización de la M-40, "y, sobre todo, a su tramo norte", por considerar que fomentará los problemas de transporte que sufren los madrileños y generará "tensiones especulativas de gran importancia en los terrenos colindantes a la vía proyectada".
Para la organización, l momento para aprobar el proyecto tampoco es el más adecuado, ya que, aseguraron, la guerra del Golfo hace prever a medio y largo plazo una grave desestabilización económica.
"La crisis energética", concluyeron, "va a afectar también al incremento de los costes finales de la obra. Los precios de los materiales de construcción van a subir, sobre todo aquellos que requieran un gran gasto de energía para su producción, como el cemento, o que tienen como meteria prima derivados de petróleo, como el aglomrado asfáltico".
(SERVIMEDIA)
29 Ene 1991