Aedenat, Arba, Comaden, Coda, Pedalibre y la Federación Madrileña de Defensa de la ontaña han justificado la iniciativa aludiendo al "continuo menosprecio" del ministro hacia los asuntos y problemas medioambientales.

Los conservacionistas insisten en que la última propuesta de cierre de la M-40 realizada por el MOPT es aún más agresiva contra el medio natural que las anteriores, de tal forma que el ahorro económico supondrá mayores perjuicios al Monte de El Pardo.

Asimismo, reiteran que el "proyecto Borrell" defiende a "los especuladores que compraron en su día en la zona de Vademarín o que han realizado opciones de compra en los interespacios entre la M-30 y la M-40".

Para Aedenat, la política que ejecuta la Administración central favorece a aquellos que utilizan el vehículo privado, a las constructuras de carreteras y a las grandes firmas comerciales, "que desean acabar con el pequeño comercio, como puede ser El Corte Inglés, que ya tiene fijados o a punto de localizar varios Hipercor en las cercanías de la M-40".

A su juicio, José Borrell menosprecia ecosistemas de ran valor, como el Monte de El Pardo o el de Pozuelo, a los habitantes que viven en las inmediaciones de la M-40 y a todos los madrileños que prefieren utilizar el transporte público.

Ante esta situación, los conservacionistas han vuelto a pedir la paralización de las obras de la vía de circunvalación y el traspaso del presupuesto destinado a este proyecto a iniciativas para mejorar el transporte público.