En declaraciones a Servimedia, Paco Segura, portavoz de Transporte de Ecologistas en Acción, reclamó que se paralicen las obras de la M-30 que ya están en marcha y que no se inicien las pendientes, como los "bypass" norte y sur.

Además, Segura pidió que se abra "un proceso de reflexión y de reconducción del asunto", con el fin de ajustar las obras a la legalidad y consensuando con los vecinos, las organizaciones sociales y los partidos políticos de la oposición qué es lo que se quiere hacer con la M-30, "en lugar de imponer este proyecto".

Según Segura, Gallardón insiste en decir que está haciendo este proyecto porque le votaron en las elecciones, "pero es que el proyecto que presentó en las elecciones no tiene absolutamente nada que ver con el que está ejecutando".

Puso como ejemplos el presupuesto de la reforma de la M-30, que en el proyecto presentado en las elecciones era de 1.800 millones de euros "y ya vamos por encima de los 4.500 millones", o la tala "brutal" de árboles que están suponiendo las obras, de la que en ningún momento se hablaba, según Segura, en el proyecto presentado en los comicios.

Para Ecologistas en Acción, la apertura de un expediente por parte de Bruselas "nos da la razón acerca de lo que venimos denunciando reiteradas veces". Además, cree que esta decisión es "un durísimo varapalo para el ayuntamiento, que ha estado utilizando todo tipo de tretas y de argucias para eximir a las obras de la declaración de impacto medioambiental, algo que es una garantía para todos los ciudadanos".