Este decreto fue aprobado el pasado 15 de junio y entrará en vigor el próximo lunes, día 1 de octubre. La prohibición afecta a las zonas húmedas incluidas en la lista del Convenio Ramsar y en las que se encuentran dentro de los espacios naturales legalmente protegidos.

En un comunicado, la organización conservacionista afirma que desde la probación del decreto laFederación Española de Caza, "olvidando que participó en el consenso que propició la prohibición", anunció la presentación de un recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Supremo, y presionó a las administraciones autonómicas.

Fruto de esa presión y de la "escasa voluntad conservacionista de algunas administraciones autonómicas, Cataluña y Valencia ya han decidido a retrasar la entrada en vigor de esta medida.

Estas decisiones seguirán "provocando la muerte de miles de aves acuáticas y apaces en los próximos años, con el único motivo de favorecer al colectivo de cazadores y sus intereses económicos", añade la nota.