Durante su toma de posesión, Blanco afirmó ayer que estimulará la actividad y competitividad de las empresas de infraestructuras y transportes, a lo que la organización ecologista responde que no es necesario, porque estas empresas son ya "líderes mundiales a costa del fuerte proceso especulativo" producido en este país durante los últimos años.

A juicio de Ecologistas en Acción, las tres consecuencias principales de la "sobredimensión" de las constructoras españolas son la incapacidad de acceder a una vivienda digna que han generado a un porcentaje importante de la población, la crisis económica y, sobre todo, la pérdida de suelo fértil.

En opinión de esta ONG, España no necesita más infraestructuras, sino menos para vivir mejor. "Los únicos que ganan realmente con un incremento de la construcción son las empresas del ramo", afirma.

"No podemos olvidar que el transporte, el sector económico que más crece (un 4,2% de media anual), consume el 36% de la energía final, y casi un 90% de este consumo es debido al transporte por carretera", continúa Ecologistas.

Según explica, la contribución del transporte a las emisiones totales de CO2 ha crecido en los últimos diez años más de un 60%, "lo que le convierte en el principal responsable de que España se aleje alarmantemente de los compromisos de Kioto".

Por todo esto, "quien más va a ganar con esta política es quien ha venido ganando ya: las constructoras. Así no es de extrañar que todas estuviesen presentes en la toma de posesión de José Blanco y le felicitasen efusivamente", concluye esta ONG, que señala, además, que a los ecologistas no se les invitó al acto.