Manuel Doeste, empresario gaditano, fue etenido el pasado miércoles en Cádiz cuando se detectó el fraude en el primero de los dos contenedores que iban a ser enviados a Guinea y que tenía similar contenido al encontrado hoy.

El segundo contenedor no pudo ser inspeccionado hasta hoy, ya que había sido enviado a Canarias, donde después sería embarcado hacia el país africano. Al ser devuelto hoy a Cádiz los agentes de la Benemérita pudieron comprobar que la mercancía era igual que la de la primera partida.

El industrial ha sido puesto en ibertad hoy tras depositar una fianza de 5 millones de pesetas, después de haber prestado declaración ante el juzgado gaditano que lleva el caso. Según las primeras investigaciones, el fraude podría suponer un montante de 12 millones de pesetas.

Por otra parte, hasta el momento han sido localizadas también en Cádiz seis toneladas de alas de pollo en avanzado estado de descomposición, de las nueve que formaban otro envío a Guinea, esta vez por parte de la empresa madrileña Cervilla S.A., y que debía esar compuesto de 12.500 kilos de "trozos de bovino sin hueso".

En estos contenedores sólo hay rollos cárnicos hechos con capas grasientas, liando despojos porcinos y alas de pollo en mal estado y la mayoría en avanzado estado de descomposición, según fuentes policiales.