"Esta reunión era impensable que tuviera lugar hace un año con el anterior gobierno y con el anterior presidente del Gobierno. Por tanto, valoramos positivamente desde CiU el diálogo entre partidos diferentes, instituciones, gobiernos y ahora entre el presidente Zapatero y Juan José Ibarretxe, y más si este diálogo se hace con respeto a pesar de las discrepancias de posiciones de unos y otros", dijo en rueda de prensa.

Duran confesó que las dos posturas sostenidas por uno y otro no le han sorprendido, puesto que aunque las formas de Zapatero han sido muy diferentes a las de su antecesor en el cargo "era prácticamente imposible pensar que al final el PSOE no acabaría rechazando en su contenido".

"Que no me sorprenda", puntualizó, "no quiere decir que no me preocupe y que no nos preocupe cada vez más. Y no tan sólo nos preocupan por lo que puedan tener de posiciones aparentemente irreconciliables entre el Gobierno vasco y el Gobierno del Estado, sino también por las repercusiones que esta situación política pueda proyectar en el conjunto de la vida política española y, en particular, sobre el proceso de elaboración de un nuevo Estatuto en Cataluña".

El portavoz de CiU expresó su deseo de que ambos gobiernos "hicieran aún un esfuerzo más para reflexionar si hay alguna otra vía que no sea la del desencuentro y la confrontación, aunque con pautas de respeto entre el Gobierno vasco y el español".

Duran apuntó la posibilidad de que el "plan Ibarretxe" se pueda "rectificar con enmiendas" y que si "realmente hay elementos de inconstitucionalidad (...), tal vez la mejor manera de resolverlo sería hablándolo, discutiéndolo y, finalmente, votando en contra, dando absoluta tranquilidad democrática a la tramitación de un proyecto a pesar de que éste, a criterio del Gobierno, pueda tener ingredientes de inconstitucionalidad".

El portavoz de CiU dijo también que no le gustaron las referencias de Ibarretxe al proceso de reforma del Estatuto de Cataluña. "El proceso catalán", insistió, "es diferente al proceso vasco en el fondo y en las formas y, por tanto, ni Cataluña ha de excusarse ni justificarse en las propuestas del Parlamento vasco, ni al revés".