Guerra, que votó a favor de la reforma en el Pleno del Congreso del pasado jueves, dijo ayer que, "salvando las distancias, algo parecido ocurrió en el momento de la disolución de la antigua URSS, en el que los dirigentes comunistas, viendo que aquello se disolvía, se envolvieron en las banderas nacionalistas de las repúblicas en que vivirían para seguir manteniendo el poder. Algo de eso, aunque más sutilmente, está sucediendo en España".

Durán se manifestó totalmente disconforme con esta reflexión y dudó de que Guerra "quisiera decir eso". En su opinión, el presidente de la Comisión Constituciónal ha hecho un "símil desafortunado", que tildó de "disparate político".

El portavoz convergente recomendó a Guerra "que duerma tranquilo", porque la reforma estutaria no va a impulsar "un proceso a la soviética" ni provocará la "desintegración" de España.