En su intervención en el pleno extraordinario en el que el jefe del Ejecutivo explicó sus propuestas ante la desaceleración económica, Duran recalcó que "la crisis tiene respuestas, el Gobierno dispone de múltiples instrumentos de política económica capaz de cambiar la política económica y el modelo de crecimiento".

Sin embargo, aclaró que "la estabilidad requiere liderazgo, ambición y cumplimiento de los compromisos, en todos los frentes. Sólo así su Gobierno puede aspirar a afrontar la crisis con éxito".

El portavoz de CiU advirtió al presidente de que, "cuando las expectativas económicas se tuercen y se presentan negativas, es preciso actuar. De lo contrario, las consecuencias pueden ser peores".

"Pronto hará un año desde que aparecieron los primeros síntomas claros de crisis en nuestra economía, y en estos meses el Gobierno ha disimulado, ha hablado de simple desaceleración, y lo que es peor, no ha tomado medidas", agregó. "Cuando hablo de medidas, hablo de medidas de verdad, no de los 400 euros".

Lamentó que la "sensación de no gobierno de la crisis general", y las previsiones del Gobierno "han quedado hechas añicos", pero la situación en otoño, alertó, "puede ser peor", con lo que "nos estamos jugando el bienestar de unos cuantos años".

Entre las "alarmas rojas" encencidas en la economía española, Duran resaltó la falta de un análisis realista de la situación, la ausencia de salidas a la crisis inmobiliaria, ola carencia de medidas para evitar que las restricciones de liquidez en el sistema financiero "ahoguen el crecimiento de la industria y los servicios".

Además, considera que falta actuar para que las personas con rentas más bajas puedan aguantar el impacto del aumento de la inflacción, reformar los servicios públicos de empleo, agilizar la inversión pública y medidas fiscales para reducir costes, entre ellas la deflactación de las tarifas del IRPF.

PROBLEMAS ESTRUCTURALES

Para Duran, "es evidente que tenemos problemas estructurales, más allá de lo coyuntural", por lo que "no somos competitivos ni estamos en camino de serlo, mientras no modifiquemos la política económica: el modelo actual está agotado".

Como vías para impulsar la competitividad, reclama, más allá de actuaciones a "corto plazo", un cambio en la política económica a largo plazo que pasen por reducir la inflación aumentar la productividad laboral, impulsar el ahorro interno y a largo plazo, apoyar la internacionalización.

Asimismo, propone mejorar la investigación e innovación, promover la liberalización de la economía, cambiar la política energética, mejorar la eficiencia y aumentar la austeridad de la administración general del Estado, y garantizar el presente y el futuro del sistema de pensiones.

El secretario general de la federación nacionalista remarcó que "reconocer la crisis, o como quiera usted llamarla, es un paso básico para poder afrontarla", y pidió al jefe del Ejecutivo que "no pretenda limitarse ahora a anunciar cuatro tristes medidas".

"Entre julio y agosto el Gobierno está obligado a confeccionar un 'Plan Anticrisis', un plan de medidas económicas y sociales de legislatura que ataque la crisis de manera integral, con medidas a corto y a largo plazo".

Con todo, recalcó que el Gobierno "es el responsable de articular estas medidas", para que nadie pueda decir en un futuro que se ha limitado a "mirar la televisión", y lamentó que el presidente no ha aportado hoy "ni una sola medida nueva".