DUEÑOS DE BARES Y DISCOTECAS DE HUELVA TEMEN PERDIDAS EN SUS NEGOCIOS POR LA MODA DEL "BOTELLON"

HUELVA
SERVIMEDIA

La moda de los conocios como "botellones" ha sembrado el malestar y la preocupación entre los propietarios de bares y discotecas de toda la provincia de Huelva, especialmente en las localidades que acogen a un mayor número de turistas en estas fechas, como es el caso de La Antilla o Punta Umbría.

Los dueños de bares y discotecas temen que esta moda provoque importantes pérdidas económicas en sus negocios. "Está claro que los jóvenes que se gastan su dinero en comprar bebidas, después no van a los bares o a las discotecas,primero, porque ya han bebido, y, segundo, porque ya no tienen más dinero", dijo el propietario de una conocida cafetería de la playa de La Antilla a Servimedia.

Explicó que uno de los motivos del aumento del consumo de "botellones" es que muchos jóvenes están en paro y no tienen recursos económicos para gastarse una media de 400 pesetas en una copa. "Para empezar", explicó, "ya 400 pesetas por una copa es mucho dinero para muchos bolsillos, y, además, cualquier joven no se conforma con una sola copa n toda la noche, por lo que prefieren gastarse esa misma cantidad en toda la noche y beber todo lo que le venga en gana a cada uno".

Algunos dueños de bares y discotecas de las playas onubenses se han quejado, además, de la "competencia indiscriminada" que constituye la apertura de establecimientos comerciales dedicados a la venta de alimentos hasta altas horas de la madrugada, sobre todo los fines de semana, en los que los jóvenes pueden adquirir las bebidas para elaborar sus "botellones".

En alunos casos, esta moda ha provado, incluso, protestas de vecinos que se ven en la obligación de tener que soportar continuos ruidos y gritos en sus portales o cerca de sus casas hasta altas horas de la madrugada.

"Los chavales vienen a beber los 'botellones' con motos, dejan los maleteros de los coches abiertos para beber y la música a tope", explicó un vecino de La Antilla, que aseguró que "en algunos casos hemos tenido incluso que salir en pijama a la calle al escuchar que arrojaban botellas contra nestra puerta".

Los dueños de algunos de los bares situados en barrios populares de Punta Umbría han decidido bajar hasta el límite el precio de las bebidas para contrarrestar el consumo de "botellones" y atraer a más clientes.

Los propietarios consultados coinciden en lamentar que, pese al problema que constituye el consumo de "botellones", "nadie se atreve a tomar alguna solución eficaz". A su juicio, los ayuntamientos deberían adoptar medidas al respecto, ya que "no sólo procovan pérdidas a nuesras empresas, sino que también resulta conflictivo para los vecinos".

(SERVIMEDIA)
16 Jul 1995
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