Este gen es el encargado de la distribución en el cerebro de la seratonina, un neurotransmisor químico que funciona como un interruptor entre las distntas partes del cerebro y que envía señales que controlan algunas acciones como dormir o comer. También está relacionado con la conducta, el humor y algunas otras cualidades humanas.

Las personas que cuentan con el gen mutante tienen pensamientos negativos con mayor frecuencia, mientras que los individuos que no presentan la mutación, responden con más calma y tranquilidad ante situaciones externas.

Los individuos con el gen alterado mostraban un desequilibiro en la cantidad de seratonina que tenan y que llegaba a las distintas áreas del cerebro que controlan la personalidad. Incluso, la mínima variacion en el funcionamiento del gen mutante hacía cambiar la personalidad entre los individuos que pensaban negativamente, que eran más neuróticos y cargados de ansiedad.

En el estudio participaron 500 hombres jóvenes, la mayoría de raza blanca y estudiantes de universidad, a los que se les sometió a un análisis de sangre para extraer su material genético y donde fue localizada la diferencia entre ls genes.