Esta iniciativa permitirá que alumnos con discapacidad intelectual completen su formación práctica, favoreciendo así su inserción laboral y su progresiva incorporación a los distintos ámbitos de la sociedad de una forma normalizada e inclusiva.

Las prácticas de ambos jóvenes tienen una duración de tres meses y se están desarrollando en servicios del recinto de Canillejas con apoyo de tutores. En el servicio de Logística, uno de ellos se dedicará al montaje de 'kits' de mantenimiento, inventario de piezas y

clasificación, empaquetado de productos de la tienda online de Metro y a escanear albaranes.

El otro está asignado al servicio de Salud Laboral y se encargará del acompañamiento a los trabajadores del suburbano madrileño

durante el reconocimiento médico, indicándoles las salas y pruebas que forman parte del proceso.

A mediados de año, con la inauguración de la nueva sede de Metro, está previsto que se incorporen otros cuatro alumnos, que desempeñarán sus labores en áreas auxiliares de la compañía vinculadas a la prestación de servicios internos.