DOS NAVARROS Y UN ALICANTINO, LOS MEJORES DONANTES DE SANGRE DE ESPAÑA
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Pablo Alda, María del Carmen Lardies, ambos de Navarra y Raúl Cámara de Campello (Alicante) encabezan el ránking de mejores donantes de sangre en España, los que mayor número de donaciones han realizado.
Su labor altruista tendrá premio. Mañana recibirán un homenaje en Avilés en el marco del XV Congreso Nacional de Donantes de Sangre, organizado por la Fundación para la Donación Altruista de Sangre y Plasma en España (Fundaspe).
Alda, el campeón, ostenta 217 donaciones, de las cuales 129 son donaciones ordinarias de sangre y 88 por sistema de aféresis (es decir recogida de plasma o de plaquetas). La primera la realizó el 22 de abril de 1971 y la última, hasta la fecha, el 22 de marzo de 2006. Tiene 65 años recién cumplidos y hace meses que se jubiló. Vive en Ansoaín y no hace falta que le avisen en fechas claves para ir a donar porque el está siempre atento.
La segunda clasificada de este ránking solidario, María del Carmen Lardies vive en Puente La Reina (Navarra), tiene 62 años y está prejubilada desde hace sólo unos días. Efectuó su primera donación de sangre el 10 de noviembre de 1.973 y la última, el pasado 8 de marzo. En total, tiene en su haber 179 donaciones.
Según fuentes del Banco de Sangre de Navarra, aunque todos los donantes tiene un gran mérito por el mero hecho de serlo, en el caso de Carmen "hay que se señalar la constancia y el esfuerzo extra que invierte ya que viene a realizar una media de 6 donaciones de sangre al año, lo que supone que se tiene que trasladar al Centro de Extracción de Pamplona, que está a 25 kilómetros de su lugar de residencia".
El cuarto clasificada es Félix Arnáiz, de Burgos, con 156 donaciones en su haber, la última hace tan sólo 10 días. Tiene 50 años, trabaja en Caja Burgos, está casado, tiene dos hijos y su grupo sanguíneo es el A+.
"Comencé a donar sangre cuando aún no tenía los 18 años, en 1973. Lo hice movido por ese espíritu solidario que se tiene cuando uno es joven. Me acuerdo que cuando llegue me advirtieron que no se pagaba por donar sangre y yo me ofendí. Mi motivación era absolutamente solidaria, como me vieron tan seguro y sólo me faltaban unos meses para ser mayor de edad, me dejaron donar sangre", explicó a Servimedia Arnáiz.
Está un poco abrumado por el homenaje que recibirá mañana en Avilés junto a seis compañeros más, los mayores donantes de España. No se lo ha querido contar a casi nadie, "porque donar sangre es algo normal, necesario, no creo ser mejor que nadie por hacer esto".
Lleva una vida sana "por convicción" y su hijo mayor también es donante de sangre, "la pequeña no creo que dé el paso nunca porque no le gustan ni las agujas ni la sangre y eso que me ha acompañado muchas veces cuando acudo a donar sangre.
(SERVIMEDIA)
29 Abr 2006
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