En el marco de la operación ’Hitula’, los agentes intervinieron unos 15 kilogramos, entre cogollos y plantas de marihuana, que cultivaban en un invernadero en el patio de una casa. También encontraron todos los elementos necesarios para su cultivo, así como 800 euros en moneda fraccionaria y varios instrumentos de pesaje.

La Guardia Civil tuvo conocimiento de la plantación a través de numerosas denuncias anónimas, en las que denunciaban un fuerte olor a marihuana que se percibía desde la calle, así como quejas vecinales por encontrarse cerca un centro escolar.

Tras realizar varias gestiones, se localizó la vivienda. Los agentes iniciaron discretas vigilancias, y lograron determinar que eran los propietarios de la vivienda los que controlaban, cuidaban la plantación y se dedicaban a la venta de la misma.

Una vez autorizada la entrada y registro, agentes de la Guardia Civil accedieron al inmueble con el apoyo de varias unidades. Desde la Benemérita, agradecen la colaboración ciudadana y recuerdan la importancia de las denuncias anónimas en la lucha contra el cultivo y tráfico de sustancias ilegales.