Este crédito extraordinario está destinado a atender las operaciones de retirada de lodos, restauración ambiental, descontaminación de suelos y demás actuaciones en el dominio públicohidráulico que se requieran como consecuencia de la rotura de la citada balsa, propiedad de la empresa Boliden-Apirsa, ocurrida el pasado mes de abril.

En concreto, para la retirada de los lodos se destinarán 1.650 millones de pesetas; para la recuperación de riberas, 900 millones; para reperfilar cauces y márgenes, 675 millones; para fijación de suelos, 675 millones, y para actuaciones destinadas a depuración, 600 millones.

Con independencia de la responsabilidad civil que corresponda al causant de la contaminación, al que habrá que exigir las indemnizaciones correspondientes, el Consejo de Ministros señala que procede urgentemente, sin perjuicio de la oportuna obtención de fondos comunitarios para financiar las actuaciones previstas de manera inmediata, habilitar los créditos presupuestarios, por lo que en el mismo decreto se establece la calificación de utilidad pública, urgencia y emergencia.