El pasado viernes, los técnicos de Asaja y de la Crawford THG, la empresa subcontratada por Boliden para peritar los daños en las consechas, terminaron las areas de evaluación de pérdidas.

Sin embargo, Asaja recomendó a los propietarios de las fincas afectadas que no recojan las cosechas hasta que la empresa no firme las actas de conformidad, ya que en caso contrario desaparecería la única prueba que existe de los daños reales causados sobre la última cosecha.

Además, la Junta de Andalucía prohibió el pasado día 5 cualquier tipo de actividad, incluida la recolección, en las fincas afectadas, por lo que la Consejería de Agricultura debe dictar una nuva orden antes de proceder a la retirada de las cosechas.

Por otra parte, Asaja exigió a la Administración que garantice la seguridad de las personas que participen en la recogida de la fruta, por considerar que se trata de una cuestión de salud pública.