DON JUAN DE BORBON.- LA CAPILLA ARDIENTE SE MANTENDRA ABIERTA HASTA QUE PASE TODO EL PUBLICO
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El horario de apertua de la capilla ardiente con el cuerpo de don Juan de Borbón podría ampliarse más allá de las 22 horas de hoy, hora a la que inicialmente estaba previsto el cierre, si todavía hay una cantidad de público considerable que quiera dar su último adiós al conde de Barcelona, según informaron fuentes de la Casa Real.
Las mismas fuentes informaron que el cuerpo de don Juan, que fue amortajado con el hábito de la Orden de Santiago y lleva el crucifijo de Alfonso XIII, fue velado en Pamplona durante la noche psada por los miembros de la Familia Real y los Monteros de Espinosa, companía de la Guardia Real que tiene atribuidos estos deberes. Sobre la siete de la mañana, el rey don Juan Carlos se ocupó personalmente de velar a su padre.
Durante esta mañana, y desde que el féretro con los restos mortales de don Juan entrara en el Palacio Real, la Familia Real, integrada por la condesa de Barcelona, el Rey y la Reina, las hermanas del Rey, el Príncipe Felipe, las infantas Elena y Cristina, doña María Cristina Mrone (hermana de don Juan) y los hijos de las infantas Pilar y Margarita, recibieron el pésame de familiares y de los representantes del Estado en la Cámara Oficial del Palacio.
Entre las personalidades que expresaron sus condolencias a la Familia Real figuraban Luis Alfonso de Borbón, Simeón de Bulgaria, los duques de Calabria, los archiduques de Austria, el presidente del Gobierno, los presidentes del Congreso y Senado, el presidente del Tribunal Constitucional y el del Consejo General del Poder Judcial.
Posteriormente se celebró una misa privada en la capilla Real del Palacio, oficiada por el obispo castrense, José Manuel Estepa, y tres capellanes de la Guardia Real, y en la que hubo preces pero no homilía.
Desde que se abrió al público la capilla ardiente, se han establecido cuatro turnos para velar, durante 22 horas ininterrumpidas, los restos mortales de don Juan. Cada turno está integrado por cuatro miembros, que corresponden cada uno a los generales y almirantes de la Casa Real, los Gandes de España, las órdenes militares y las Casas del Rey y de Barcelona.
El féretro de don Juan reposa en la pequeña capilla cubierto con una bandera de España y el manto de la Virgen del Pilar, sobre los que destaca un gorro de la Orden de Santiago. Igualmente, cuatro cojines muestran las condecoraciones del conde de Barcelona (el Toisón de Carlos III, las Grandes Cruces al Mérito Militar, Naval y Aeronáutico, el Bastón de Mando de Capitán General de la Armada sobre sable y el Collar de la Orden deCalatrava).
En el acceso a la capilla ardiente pueden contemplarse las coronas de flores enviadas por los representantes de la Grandeza de España y del Estado, entre las que destacan por su belleza, ya que han sido elaboradas sólo con orquídeas, las remitidas por el presidente y el vicepresidente del Gobierno.
(SERVIMEDIA)
02 Abr 1993
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