Según los doctores que han intervenido en este estudio, las razones por las que los hombres no se someten a tratamiento por esta disfunción hay que buscarlas en que "sienten vergüenza de exponer su situación o que consderan que les afectará sólo de forma temporal; otras veces restan importancia al sexo en su relación de pareja y otras se producen por falta de concienciacion sobre el problema y su solución".

Según la doctora Fernández Micheltorena, participante en el estudio, "los médicos no suelen preguntar al paciente sobre la citada enfermedad por falta de tiempo o porque les resulta un tema embarazoso, y esperan a que sea el paciente el que hable del asunto".

Todos estos obstáculos significan que los hombre con disfunción eréctil pueden padecerla durante meses, incluso años, sin recibir tratamiento, según los expertos.

A su juicio, los médicos de Atención Primaria deberían hacer una detección activa de esta dolencia, como un síntoma más que se puede presentar en pacientes hipertensos, diabéticos, fumadores, deprimidos, en enfermedades endocrinas, neurológicas, etc.

Según los responsables del estudio, los nuevos tratamientos orales para la disfunción eréctil presentan ventajas reales desde el punto e vista de la comodidad, facilidad de uso, discreción, eficacia y por el menor índice de efectos secundarios.

Para el doctor José María Pomerol, jefe del Servicio de Andrología de la Fundación Puigvert de Barcelona, "los nuevos tratamientos orales han permitido que los hombres con disfunción eréctil recuperen la función como respuesta normal al estímulo sexual".

Otra de las características de estos medicamentos, según Pomerol, es su eficacia en un corto espacio de tiempo, a partir de los 20 minuts desde su ingestión, y empieza a disminuir 5 horas después.