La representante de la Comisión Europea ha manifestado que la discriminación por razón del sexo es un problema global, un derperdicio de recursos y talentos, y una carga económica para la sociedad en conjunto.

Cinco años después de la Conferencia de Beijing, Ginebra ha vuelto a ser hoy el escenario de una nueva reunión para examinar los progresos que ha realizado Euopa en la lucha contra la discriminación de las mujeres. Las conclusiones que se obtengan hoy de este evento servirán para la preparación del encuentro de Naciones Unidas en Nueva York, que se celebrará con el mismo objetivo en junio.

Tras esta reunión, la Unión Europea tiene previsto celebrar otra en torno al mismo asunto durante la primera semana de febrero, donde estarán presente la Presidencia actual,la anterior y la siguiente, así como delegados de ONG del ámbito y representantes de la comisión sbre los Derechos de la Mujer del Parlamento Europeo.

"Yo estoy comprometida personalmente a vigilar que la igualdad entre sexos sea aplicada en todas las políticas de la UE y a presentar ante la Comisión Europea un nuevo y completo programa al respecto durante el primer semestre del año 2000", declaró Diamantopoulou en Ginebra.