Recientemente, el citado grupo de Norfolk denunció a la compañía Ryanair por discriminación, al impedirles ésta tomar uno de sus vuelos por no llevar guías.

Según Howitt, a pesar de que Ryanair anunció un cambio en su política corporativa, la compañía aún sigue insistiendo en que las personas ciegas o con discapacidad visual deben ir acompañadas.

La obligación de ir acompañados por un guía sin discapacidad visual implicaría doblar el precio del billete. En la misma situación se encuentran las personas que necesitan una silla de ruedas para desplazarse.

El Parlamento Europeo votará el próximo mes nuevas medidas con el fin de impedir la discriminación de los pasajeros con discapacidad por parte de las compañías aéreas.

Howitt ha agradecido a la organización defensora de las personas ciegas "Guide Dog for the Blind" el haber trabajado conjuntamente con el Parlamento y con el Foro Europeo de la Discapacidad para conseguir nuevos derechos, y al grupo de Norfolk por haberse desplazado hasta Bruselas para mostrar las carencias de la legislación.